martes, 14 de marzo de 2023

El tiempo no basta

 El tiempo no basta

Ha transcurrido una eternidad desde la última vez que la vi, la última vez que fue mía y fui suyo, después de aquello nos vimos una vez, almorzamos, conversamos y pasamos un rato ameno pero hasta ahí.

La situación para mí estaba clara, no más, no más ratos de pasión, no más sexo suave, sexo duro, no más conversaciones esotéricas en la tina, no más vino, acompañado de charla entretenida, no más la sensación de sentir mi pene profundo en su cuerpo mientras sostengo tu cabello, no más esa vista erótica que hoy cuando la recuerdo me provoca erecciones y una sonrisa cómplice.

Bajar del auto, abrir la puerta, ayudarla a salir y un beso suave, una apretada en el trasero, sentir a través de la tela que no llevabas ropa interior, anuncio sensual de lo que sigue.

Subes la escalera, yo detrás veo tu figura bamboleando y el deseo me consume.

Me siento en la cama, te atraigo hacia mí, bajo los tirantes tu vestido, para dejar tus pechos turgentes expuestos, los contemplo con una mirada ansiosa, los acaricio, los trato de abarcar, los apretó, siento entre las yemas de mis dedos tus pezones.

Mis labios los besan, abro mi boca, los succiono, apretó suavemente entre mis dientes los pezones y mi lengua gira sobre ellos, siento tu mano recorrer el camino hacia mi entrepierna y comprobar que mi pene está turgente y ansioso.

Termino de bajar tu vestido, quedas desnuda ante mi beso, ambos pechos, te halo y te acuesto, me quito la camisa y me abalanzó sobre ti, besando la geografía de tu cuerpo, recorriendo tu abdomen, besando tu pubis y besando tu sexo, mi lengua lame suavemente y otro beso.

Te enderezas, me bajas el pantalón, te ayudo, retiro mi ropa interior. Tu boca ansiosa, se abalanza sobre mi pene, lo besas, abres tus labios, lo introduces en tu boca, juegas con tu lengua. Tomo tu cabello y lo halo hacia mí para que no quede nada afuera, seguimos en ese movimiento, tus labios, tu boca recorren mi pene, escucho los ruidos, siento el delicioso calor de tu boca, apretó con más fuerza, luego una pausa y de nuevo apretó tu boca contra mí, nada que afuera, de pronto paro, te tiro de cabello hasta la cama te pongo de cuatro y busco tu vagina que está húmeda y dulce para clavar mi pene, no lentamente, nos suavemente, sino fuerte y profundo, halo con fuerza tu cabello y te empiezo a dar duro, rápido, apretó con mi mano libre tu nalga, te nalgueo y queda la marca roja de mi mano, eres mía, eres para mi placer, para mi gusto y no pararé hasta qué este satisfecho. Eyaculo mi semen caliente, paro me acuesto, tomo tu cabello y te llevo tu boca a mi pene para que limpies la última gota de placer.

Tengo pendientes contigo, quiero todo tu cuerpo, quiero tus manos, tu boca, tu vagina, tu culo, tu mente. 

Que no quede lugar, sin penetrar, sin besar, sin acariciar, quiero quedar exhausto de placer y repetir tantas veces como el cuerpo aguante, Que seas mía completamente, que seas para mi placer, para mi deseo más pervertido, para mi pasión más intensa, quiero que exhaustos reposemos tu cara sobre mi pecho

Por eso el tiempo no basta