La Electricidad nos enferma y nos engorda

La electricidad nos permite usar la computadora o la consola de videojuegos hasta altas horas de la noche, pero esto puede reflejarse en nuestra salud y nuestra cintura, advierte un estudio publicado en 2012 en la revista británica BioEssays. "Por miles de arios nos levantamos al amanecer e hicimos casi todo a la luz del día. De noche había poco que hacer, aparte de dormir", explica la autora del estudio, Cathy Wyse, investiga-dora de la Facultad de Ciencias Biológicas de la Universidad de Aberdeen, en Escocia. "Luego, en el último siglo, empezamos a depender de la electricidad y a desvelarnos, lo que altera nuestro ritmo circadiano natural y el equilibrio de importantes hormonas como la melatonina, la insulina y el cortisol". Según otros expertos, hay pruebas contundentes de que es mayor la incidencia de cáncer de mama, cardiopatías y diabetes entre las per-sonas que trabajan de noche. Wyse empezó a sospechar que la electricidad afecta la salud en 2005, mientras estudiaba los efectos del desfase horario en el rendimiento de los caballos de carreras. No confirmó sus sospechas hasta arios después, cuando observó que alterar el tiempo de exposición a la luz y la oscuridad en ratones de laboratorio los hace engordar y acorta su vida. "Pensé que podía haber un error porque los resultados eran muy constantes", cuenta, "pero tampoco varia-ron cuando repetí el estudio con otros animales". Una investigación anterior parece respaldar la teoría de Wyse: re-veló que las personas que se mudan al norte, lejos del ecuador —donde la duración del día y la noche es constante todo el ario—, a latitudes con mayor fluctuación entre el día y la noche, suben más de peso.

Aprovecha el hallazgo:

La electricidad es inevitable, pero puedes limitar los efectos que tiene en tu salud manteniendo un horario regular de sueño: levántate y acuéstate a las mismas horas los siete días de la semana. Un estudio realizado en 2012 por la Universidad de Múnich re-veló que las personas que tenían un horario de sueño entre semana y otro diferente los sábados y los domingos tendían más al sobrepeso. Asegura la mayor oscuridad posible en tu dormitorio bloqueando las luces de despertadores y teléfonos, y restringe el uso nocturno de la televisión y la computadora; por ejemplo, apaga todo antes de las 10 de la noche.